Los ojos irritados y el dolor de garganta son ejemplos de afecciones a la salud provocadas por la contaminación en el aire. Los habitantes de la ciudad son más vulnerables a las enfermedades respiratorias por esta causa.
La calidad del aire se ve afectada por la presencia de industrias, automóviles, el transporte motorizado público, los desechos en los hogares, entre otros. Los principales contaminantes son el dióxido de azufre (SO2), el monóxido de carbono, óxidos de nitrógeno (NOX), partículas suspendidas, compuestos orgánicos volátiles (COV) y el Ozono (O3).
El ozono es uno de los componentes que más afecta a la atmósfera de México. En 2006 la concentración de este contaminante rebasó 218 días la Norma, es decir ,que el 60% del año estuvo por arriba del límite permitido.
Estos contaminantes causan daños a la salud, tales como congestiones nasales, asma, irritación de los ojos, problemas pulmonares, bronquitis e irritaciones de nariz y garganta.
Para conocer la calidad del aire que respiramos existe el Índice Metropolitano de la Calidad del Aire, conocido como IMECA. Es un sistema que informa a la población, cada hora, qué tan limpio o contaminado se encuentra el aire en la Ciudad de México y el Área Metropolitana.
Se calcula que las principales fuentes de contaminación del aire son actividades humanas como el uso de automóviles, diversos combustibles y las plantas generadoras de electricidad.
Para contribuir a mejorar la calidad del aire en la ciudad, te recomendamos evitar viajes innecesarios en automóvil, compartir el transporte al trabajo o escuela, usar la bicicleta para tramos cortos, mantener tu vehículo en condiciones adecuadas y disminuir el uso de gas y electricidad.